El invierno es la época del año en la que hace más frío, por lo tanto los ojos están expuestos a agentes agresores. Al igual que en verano, el sol perjudica los ojos y además, los ojos están expuestos a los efectos del aire, el frío y al ambiente seco provocado por la calefacción. La consecuencia de estas exposiciones provoca irritaciones oculares y sobre todo la sequedad ocular.
Consejos para cuidar los ojos en invierno y prevenir las consecuencias de la exposición de nuestros ojos al frío, a la calefacción, al aire y al sol del invierno:
- Para evitar la sequedad ocular en los ambientes con calefacción tenemos que tener una temperatura adecuada y parpadear a menudo para que el ojo se hidrate y utilizar colirios humectantes o lágrimas artificiales que forman una película protectora encima la córnea para que esté húmeda, sobre todo en pacientes portadores de lentos de contacto.
- Si salimos al exterior, para protegerlos del viento y del frío, tenemos que utilizar gafas protectoras que pueden ser pantallas solares o gafas de sol con los filtros adecuados según las necesidades de cada persona.
- Las personas que hagan deportes de montaña se tienen que proteger del sol con unas gafas adecuadas, porque en la montaña el nivel de radiaciones ultravioleta e infrarroja es mucho más grande que el que soportamos habitualmente y puede causar serias quemaduras a la córnea además de favorecer por acumulación de radiaciones, el desarrollo de cataratas y lesiones en la córnea y en la retina.
Apolònia Socias
Óptica optometrista por la UPC de Optica Balear
Colegiada 9593