Cuidado visual > Relación entre visión y tablets o ebooks
Los nuevos terminales de lectura digital tienen pantallas de tinta electrónica (e-ink), que no emiten luz, por lo que son más suaves para la vista, para propiciar ser “de fácil lectura para nuestros ojos” y de “igual apariencia y capacidad de lectura que la de un libro convencional”.
Los estudios médicos revelan que leer en las actuales ebooks no es en sí mismo algo perjudicial para la vista, pero sin duda hay que prevenir y saber utilizarlos para una correcta salud visual.
Sugerimos los siguientes consejos básicos para un uso saludable de los nuevos soportes digitales:
- Evite su utilización en momentos de mucho cansancio visual.
Descanse su vista cada cierto tiempo. Una pausa de 5 minutos por cada hora de lectura es suficiente. No utilice estos medios electrónicos cuando esté demasiado cansado. Para conservar la salud visual es bueno que los ojos tengan un trabajo adecuado. - Evite los reflejos de la luz sobre la pantalla.
Tenga una luz apropiada. Los ebooks cuentan con pantallas de tinta electrónica que no emiten luz. Sin embargo, existen modelos que pueden retroiluminarse como los iPad y que cuentan con un sistema activo de emisión, tal y como lo hacen los portátiles, el ordenador de mesa o la televisión. El uso de estos sistemas se suma al consumo diario que hacemos del resto de terminales, aumentando los riesgos sobre nuestra vista. Es mejor una iluminación lateral. Evite los reflejos. El exceso de luz también puede ser perjudicial. Ajuste el brillo y contraste de la pantalla en función de la iluminación de la zona de trabajo. Aumente la velocidad de refresco de la pantalla: 70-75 Hz es una buena medida. - Utilícelos a una distancia adecuada.
Mantenga el monitor de su tablet o ebook a unos 35-40 centímetros de distancia y ligeramente por debajo del nivel de los ojos. Dentro de lo posible, ajuste el tamaño de la letra de manera que se evite una aproximación excesiva por dificultad en la lectura. - Evite la sequedad ocular mediante sencillos parpadeos.
Es necesario parpadear. Debido a la concentración, solemos hacerlo menos de lo normal. Sin darnos cuenta podemos estar forzando nuestra vista, en especial cuando contamos con entornos de lectura “enriquecidos” (incluye vídeo, fotos, interacción, etc.) que captan de forma muy intensa nuestra atención. - Realice pausas de relajación ocular.
Para descansar los ojos, alterne la visión entre un objeto cercano y otro lejano. Es aconsejable realizar pausas de cinco minutos por cada hora de lectura, apartando la mirada de la pantalla y enfocando “de lejos” para que se relajen los músculos del ojo. - Gestione de forma inteligente su exposición global.
Las pantallas de plasma cuentan con mayor calidad de contraste, realismo en los colores y mejores ángulos de visión. En estos casos, lo ideal es alternar este tipo de soportes con un tiempo adecuado de exposición; no es lo mismo su uso después de una jornada larga de ordenador, que cuando venimos de pasar una jornada de relax en el campo. - Revise anualmente su vista.
No olvide someterse a una revisión visual anual. Pasar una revisión anual por un profesional del cuidado de la visión demostrará si la persona está preparada para realizar con efectividad las demandas que exige la lectura en soporte digital. Además de detectar posibles problemas en cualquier otro ámbito.